Es una de las fiestas religiosas más antiguas de la Isla, desde la conquista de Tenerife, el Cabildo ordenó que se celebrara en mayo de 1496. Era tradición enramar y embellecer las calles por las que procesionaba el Santísimo Sacramento. En un principio se trataba sólo de esparcir brezo con pétalos y flores de distintos colores. Fue en La Orotava donde se empezaron a «diseñar» los tapices como los entendemos hoy en día. Doña Leonor Castillo de Monteverde fue la primera en trasladar esta idea a La Laguna, aceptada rápidamente por el resto de familias.
Las primeras alfombras de La Laguna datan del año 1907, y se atribuye a Luis Marrero, antiguo sacristán de la Concepción el ser impulsor del Corpus en La Laguna, ya que fue obra de él la primera alfombra de esa época, la cual se situaba en la esquina de la plaza de la Concepción.
Pero no debemos perder el verdadero sentido de esta festividad, la celebración eucarística de la tarde del día del Corpus nos remonta al clima espiritual del Jueves Santo, el día en que Cristo, en la víspera de su pasión, instituyó en el Cenáculo la Santísima Eucaristía.
Así, el Corpus Christi constituye una renovación del misterio del Jueves santo, obedeciendo a la invitación de Jesús de proclamar públicamente lo que él dijo e hizo en lo secreto. Así pues, en la solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo reafirmamos con gran gozo nuestra fe en la Eucaristía, el misterio que constituye el corazón de la Iglesia.
- EUCARISTÍA Y PROCESIÓN de CORPUS CHRISTI
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